Llegando estos días, es momento de hacer balance de las Ferias y Fiestas y no hay que ser muy observador para darnos cuenta del tremendo declive que año tras año vienen sufriendo. Las Fiestas Patronales un año más, no han tenido la calidad que merece una población de más de 15.000 habitantes, hecho que a nadie sorprende porque los 9 días de programación han sido una réplica idéntica de años anteriores, aunque habiendo eliminado cosas que funcionaban, como la tradicional paella solidaria. El programa de festejos es un reflejo de la mala gestión del nuevo equipo de Gobierno, que demuestra su falta de ideas y no consigue dar esplendor y participación a nuestra feria.
El Partido Popular ya advirtió de la mala ubicación del recinto ferial, y es un hecho constatable que además de tener escaso atractivo en los días de mayor afluencia de público, queda desierto en mitad de la que debería ser nuestra semana grande, porque los feriantes no encuentran ningún incentivo para continuar en nuestra localidad. Si en otras festividades la feria se puede trasladar al centro, no entendemos qué es lo que lleva a nuestro ejecutivo municipal a seguir errando en su empeño de no modificar este emplazamiento en septiembre. Debe ser que no quieren reconocer el error de ese recinto ferial y el dineral que costó hacerlo.
Tampoco se puede caer en el error de culpar a los vecinos por preferir regentar espacios hosteleros de la zona centro, que defienden sus negocios con buen trabajo y profesionalidad. El pueblo sale a la calle en fiestas, visita a su Patrona y se encuentra una plazoleta vacía. La Congregación de la Virgen y las asociaciones mueven a su gente, se implican y lo intentan, pero la vecindad demanda actuaciones musicales más diversas, actividades de ocio que no se centren en el consumo de alcohol, eventos para niños en los que no haya que esperar una hora para 3 minutos de disfrute, actos para todos los públicos que no sean lo mismo de siempre… La petición está en la calle, ahora hace falta que la recojan nuestros gobernantes y no sigan haciendo oídos sordos.
Han sido las primeras Fiestas Patronales del gobierno que venía a cambiar todo lo que se estaba haciendo mal, y es una pena que hayan desperdiciado la primera oportunidad que tenían para demostrarlo. Nuestra “Miguelturra Festiva” no sólo es carnaval; es tradición popular, son hogueras, banderas, el Cristo y la Virgen entre muchas otras cosas, así que esperamos que inviertan sus esfuerzos y nuestros recursos de manera más efectiva.
Partido Popular de Miguelturra
