La Dirección General de Protección Ciudadana, dependiente de la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, ha activado este jueves el Plan Especial de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones en Castilla-La Mancha (PRICAM). La decisión, enmarcada en la Fase de Alerta (Situación Operativa 0), se produce tras el registro de lluvias intensas y tormentas en varias provincias, con riesgo de crecidas repentinas en barrancos, arroyos y ríos.
El PRICAM, activado a las 18:00 horas, busca coordinar acciones preventivas y operativas para mitigar el impacto de posibles inundaciones locales, ante un escenario meteorológico que amenaza con agravarse en las próximas horas.
Motivos de la activación: Lluvias torrenciales y riesgo hidrológico
Las precipitaciones registradas en la región, caracterizadas por su intensidad y por ir acompañadas de tormentas eléctricas en zonas como Guadalajara, han elevado el nivel de alerta. Según las autoridades, estos fenómenos podrían generar aumentos súbitos de caudal en cauces secundarios, ramblas y ríos, especialmente en áreas montañosas o de difícil drenaje.
El Instituto de Meteorología ha subrayado que la saturación del suelo por las lluvias persistentes incrementa el riesgo de desbordamientos e inundaciones relámpago, capaces de afectar infraestructuras y vías de comunicación.
Incidentes reportados: Primeros efectos de las crecidas
Los primeros efectos de las precipitaciones ya se han materializado en la provincia de Guadalajara:
- Villares de Jadraque: Un puente en una pista forestal colapsó debido a la fuerza del agua, aislando temporalmente la zona.
- Miedes de Atienza: El río Miedes ha alcanzado la carretera CM-1005, provocando cortes y dificultando el tránsito.
Estos incidentes reflejan la vulnerabilidad de las infraestructuras rurales ante fenómenos meteorológicos extremos y han llevado a las autoridades a reforzar la vigilancia en carreteras secundarias y áreas rurales.
Recomendaciones de Protección Civil: Claves para la seguridad ciudadana
Ante la situación de riesgo, la Dirección General de Protección Ciudadana ha emitido un decálogo de medidas preventivas:
- Verifique el estado de las carreteras antes de viajar, utilizando fuentes oficiales como la Dirección General de Tráfico (DGT).
- Evite estacionar cerca de ríos, barrancos, puentes o zonas históricamente inundables.
- No intente cruzar tramos inundados al volante. Basta con 30 cm de agua para que un vehículo sea arrastrado.
- Identifique puntos elevados en su entorno para resguardarse en caso de crecida repentina.
- Use el teléfono de emergencias 1-1-2 con responsabilidad, priorizando llamadas para situaciones críticas.
Las autoridades recalcan que la prevención ciudadana es vital para reducir riesgos. “Un solo error de cálculo puede costar vidas”, advierten desde Protección Civil.
Movilización de recursos: Coordinación interinstitucional
Bajo la Fase de Alerta del PRICAM, se ha desplegado un operativo que incluye:
- Refuerzo de bomberos y equipos de rescate en zonas críticas.
- Vigilancia continua de presas, cauces y puentes.
- Colaboración con ayuntamientos para habilitar albergues temporales si fuera necesario.
Además, se mantiene un contacto permanente con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para actualizar pronósticos y ajustar las medidas.
Concienciación ciudadana: Un llamamiento a la prudencia
Las lluvias torrenciales son un recordatorio de la fuerza impredecible de la naturaleza. Castilla-La Mancha, región con experiencia en gestión de inundaciones, enfrenta este episodio con protocolos afinados, pero la colaboración ciudadana es insustituible.
En caso de emergencia, recuerde:
- Mantenga la calma y siga las indicaciones de las autoridades.
- Aleje a niños y personas mayores de zonas inundadas.
- Desconecte servicios eléctricos y de gas si el agua entra en su vivienda.