Ciudad Real Noticias.- Adrián Reinosa, uno de los alumnos más jóvenes de la Escuela Taurina de Alcázar de San Juan, se convirtió en el protagonista destacado del tentadero público celebrado el domingo en la plaza de toros de Manzanares como homenaje a Ignacio Sánchez Mejías en el 82º aniversario de su mortal cogida en este coso. Además de ganas, el chaval de Ruidera puso torería, arte e ilusión. Sus compañeros también lo intentaron, pero la flojedad de las vacas impidió su lucimiento.
La peña taurina “Ignacio Sánchez Mejías” homenajeó a su titular con un tentadero público de vacas. Se anunciaron cuatro ejemplares de Mariano Sanz, que al final fueron cinco debido al poco lucimiento que permitieron las dos primeras. Con la tercera llegó lo más entretenido del anochecer del domingo gracias a las ganas y técnica de Adrián Reinosa, que apunta muy buenas maneras y entendió a la perfección a la añoja que le tocó.
El recuerdo a Sánchez Mejías llegó tras el paseíllo de los alumnos de la Escuela Taurina de Alcázar de San Juan. Unos niños llevaron un ramo de flores al lugar del tendido 7 en el que el sevillano, sentado en el estribo, intentó su último pase aquel fatídico 11 de agosto de 1934. Los asistentes guardaron un minuto de silencio mientras se oía de fondo la voz de Ana Belén interpretando la canción “Alma ausente”, con versos del “Llanto por Ignacio Sánchez Mejías” de Federico García Lorca.
La Escuela Taurina de Alcázar, como agradecimiento por contar con sus alumnos, entregó un “Quijote” a Francisco Jiménez Navarro, presidente de la peña taurina “Ignacio Sánchez Mejías”, organizadora de este tentadero público que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares.