Ciudad Real Noticias.- El Ayuntamiento de Ciudad Real ha anunciado el lanzamiento de una campaña integral de concienciación y control dirigida a abordar uno de los problemas más señalados por los vecinos: la recogida de excrementos caninos de la vía pública. Bajo el lema “Ciudad Real con R de Respeta”, la iniciativa busca fomentar la responsabilidad cívica de los dueños de mascotas y crear un entorno más limpio y saludable para la convivencia.
El concejal de Servicios a la Ciudad, Gregorio Oraá, destacó que la recogida de los excrementos de los perros es “obligatoria” y recordó la prohibición de orinar en las fachadas de los edificios y en el mobiliario urbano según la ordenanza de limpieza. La campaña surge como respuesta a las preocupaciones expresadas por los ciudadanos en las reuniones mantenidas por los concejales de barrio con las asociaciones vecinales.
En la presentación de la iniciativa, Oraá subrayó la importancia de abordar una problemática que afecta a la convivencia y la limpieza de la ciudad, así como a la salud pública. Con alrededor de 13,500 perros censados en la capital, se estima que el incumplimiento de las obligaciones cívicas por parte del 10% de los propietarios puede generar un problema significativo en la vida diaria.
El concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Chamorro, hizo un llamamiento a la colaboración y concienciación ciudadana. Destacó que el objetivo de la campaña no es recaudar fondos, sino promover el civismo y la convivencia. Chamorro anunció un aumento en el control de estas conductas por toda la ciudad, que comenzará de inmediato. Las sanciones por incumplir las obligaciones establecidas en la ordenanza de limpieza podrían alcanzar hasta los 300 euros.
La campaña no se limitará a la imposición de sanciones; se centrará en la información y la concienciación a través de campañas en medios de comunicación y un aumento en la vigilancia. Además, se buscará involucrar a la ciudadanía a través de la concejalía de Participación, promoviendo una responsabilidad compartida para lograr una ciudad más limpia y libre de problemas de salud asociados a los excrementos caninos, especialmente para niños, mayores, personas con discapacidades visuales o en silla de ruedas.
Con “Ciudad Real con R de Respeta”, el Ayuntamiento espera no solo resolver una preocupación ciudadana, sino también fomentar un cambio cultural en la responsabilidad de los dueños de mascotas, creando un entorno urbano más amigable y respetuoso para todos.